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Cómo fijar tus objetivos sin cometer errores comunes

Nunca es un mal día para replantearte tus objetivos, bien sean anuales o en un plazo más corto. Aprende a cómo fijar tus objetivos sin cometer errores comunes.

Para garantizar que cumplan, asegúrate de no cometer estos errores tan comunes:

Ser generalista.

Los objetivos deben ser muy específicos. Por ejemplo, no basta con querer «mejorar mis habilidades de comunicación». Ponte detrás de la generalización y profundiza en lo que quieres lograr exactamente. El objetivo de la comunicación se convierte en cambio: «Quiero dejar de enfadarme con mis representantes de ventas sobre la calidad de sus clientes». Señalar exactamente lo que quieres lograr te permite entonces identificar los comportamientos que necesitas empezar o dejar de hacer para obtener resultados.

Metas poco realistas.

Tu objetivo se tiene que conseguir. Si el tamaño promedio de los tratos de tu compañía es de 250.000 euros, no debes fijar un objetivo de 500.000 euros. Las metas inalcanzables hunden la motivación y el compromiso de los empleados.

Falta de compromiso.

Lo quieres, pero no lo suficiente como para seguir adelante y hacer lo que sea necesario. Sé honesto contigo mismo. Esperar que algo suceda o se logre es muy distinto a asegurarse de que suceda. Sólo harás realidad tu objetivo si es lo suficientemente importante como para dedicarte por completo a un plan de éxito.

No identificar una línea de tiempo real.

Las metas y las fechas de vencimiento te mantienen en el camino y aseguran que los objetivos se cumplan a tiempo. Apunta alto, pero haz que tus expectativas sean prácticas. Roma no se construyó en un día, así que permite una cantidad de tiempo razonable para hacer el trabajo.

No hay plan de acción.

Puede que tengas un objetivo y una línea de tiempo, pero sólo una nebulosa – o ninguna idea en absoluto – en cuanto a cómo hacer que suceda. Planifica tu trabajo y trabaja en tu plan, como dice el dicho. Identifica los pasos que necesitas dar para llegar. Sin un mapa, ¿quién sabe dónde terminará? Ciertamente, no donde usted pretendía estar.

Fijar metas puede ser divertido, emocionante y vigorizante. Con metas bien pensadas, compromiso, planificación y ejecución, estás seguro de tener éxito. Como canta Van Morrison, «Estás haciendo tu propia realidad, todos los días». ¡Haz de tu realidad un año dedicado a lograr objetivos concretos y éxito!